Estoy convencido de que en alguna ocasión habéis escuchado a alguien hablar o habéis leído algún artículo acerca de la relevancia que tiene el branding para las distintas marcas. Y es que no es una cuestión baladí ni mucho menos. Estamos hablando de uno de los grandes secretos que tienen las distintas organizaciones para subsistir y para destacar entre las demás, así que nos parece lógico que se genere tanto contenido en relación a este tema y también nos parece lógico que haya cada vez más gente interesada en comprender todavía más y mejor de qué trata todo esto.
Lo cierto es que el branding es algo que puede jugar un papel fundamental en todo tipo de empresas y marcas. Incluso para las que son más pequeñas. Hay un ejemplo que siempre pongo para hablar de esto y es el equipo de fútbol de mi pueblo. La localidad de la que soy natal tiene apenas unos 6.000 habitantes. No es demasiado grande y, como podéis intuir, el equipo de fútbol no es el mejor del mundo. Lleva jugando muchos años en categoría regional y ni siquiera ha tenido la más mínima posibilidad de subir a Tercera división, que para los equipos de corte provincial o comarcal es como el máximo escalón al que pueden llegar.
Hubo una época en la que el club estaba al borde de la desaparición. Ya sabéis que todos estos equipos dependen en muchas ocasiones de subvenciones que les puedan dar desde el Ayuntamiento. La crisis económica que surgió en 2007 puso las cosas muy difíciles a todos estos clubes porque esas subvenciones de las instituciones públicas prácticamente brillaban por su ausencia. Además, y debemos reconocerlo, el club se encontraba en una época en la que no terminaba de enganchar al aficionado, así que la cantidad de personas que asistían al estadio domingo tras domingo era bastante irrisoria.
Estaba claro que algo había que hacer para luchar contra esta situación. Es aquí donde entra todo ese desarrollo de branding del que estábamos hablando más arriba. Necesitaban un agente, encontrar argumentos para demostrarles que tenían que sentirse orgullosos del equipo de su pueblo y que, además, se lo iban a pasar bien si acudían al estadio. Veíamos complicado conseguirlo para un equipo que apenas pasa de categoría regional, pero lo cierto es que decidimos probar fortuna para ver cómo terminaba nuestro plan.
Una noticia publicada en la página web de Palco23 aseguraba que, en 2021, había crecido el número de clubes deportivos en España en un 2’3%. En concreto, el fútbol era el deporte que más clubes tenía al superar la cifra de los 31.000 clubes. Como podréis deducir, es necesario destacar de alguna manera para conseguir que nuestro club sea conocido principalmente en nuestro pueblo, pero también en toda la comarca. El branding era quien nos iba a ayudar a conseguir este objetivo tan ambicioso.
Tuvimos que darle muchas vueltas a la cabeza y tener en cuenta que teníamos que huir de la publicidad tradicional y centrarnos en los valores de nuestro club. Empezamos a darle vueltas a la cabeza y creímos conveniente destacar algo que en nuestro club sí tenía pero que los demás clubes de las localidades vecinas e incluso de la región no tenían. Nosotros éramos centenarios. El club de nuestro pueblo se había mantenido durante la Guerra Civil, la dictadura, las distintas crisis económicas… algo que no había conseguido nadie en la zona. En los pueblos de alrededor muchos clubes habían desaparecido y se habían refundado después con un nombre diferente, pero nosotros habíamos existido desde hacía más de un siglo sin pasar por refundaciones ni nada de ese tipo.
Otro de los valores que debíamos poner en valor y que creíamos que habían sido olvidados por la gente era la labor que ha tenido el club de fútbol a lo largo de su historia en otros eventos que tienen que ver con el pueblo. Ha dado su apoyo a los otros clubes deportivos del municipio, ha participado en diversas campañas benéficas que han sido organizadas desde las instituciones y organizaciones municipales y siempre ha sido parte importante en la organización de las fiestas patronales, poniendo a su propio personal al servicio de todo aquello que necesitaran desde el Ayuntamiento para que todas las actividades de las fiestas patronales estuvieran perfectamente organizadas.
Teniendo en cuenta todos estos valores, desde la Junta Directiva del club decidimos crear un eslogan para la campaña 2021/2022, que fue “Un pueblo, un corazón” y ofrecimos un acto de inauguración de la campaña en la que le contamos a la gente la relevancia que ha tenido el club para el pueblo a lo largo de su historia y lo realmente orgullosos que debían sentirse de tener un club de fútbol centenario en una localidad de apenas 6.000 habitantes. Para el acto, ya teníamos a mano distintos productos que habíamos pedido previamente: bufandas y banderas con el escudo del club y el eslogan para dicha campaña. En nuestro caso, lo solicitamos en Fábrica Banderas porque también tenían la opción de fabricar rollups, que para un acto de presentación como ese siempre viene muy bien.
La verdad es que los resultados se empezaron a notar de inmediato, desde ese mismo momento de la presentación de la campaña. No solo conseguimos vender una gran parte de las bufandas y banderas que habíamos pedido, sino que empezamos a notar un repentino aumento de la cantidad de gente que vino al estadio durante esa temporada. Teníamos la sensación de que habíamos conseguido lo que buscábamos. El club de fútbol volvía a ser popular en el pueblo y la verdad es que eso ayudaba a que los resultados deportivos fueran los que queríamos. Tanto es así que esa temporada conseguimos el ascenso de categoría y, durante la temporada siguiente, conseguimos mantenernos en la nueva división que nos habíamos ganado.
Hay mucha gente que nos ha felicitado por haber seguido el camino que decidimos. Nos hemos ganado un reconocimiento institucional por parte de las autoridades de nuestro municipio y las de nuestra región. Además, también hemos recibido la felicitación de muchos clubes de la zona que han sido rivales nuestros en multitud de ocasiones pero que han reconocido que nuestra manera de gestionar esta campaña les ha inspirado. Y no hay nada que nos enorgullezca más que haber recibido todo ese cariño tanto de rivales como de personas que aman nuestro club.
Hay que saber bien dónde estamos y contra quién competimos
Debemos tener claro cómo es nuestro público objetivo y qué intereses tiene. Las personas que vienen a ver nuestros partidos está claro que aman el fútbol… pero no solo el que pueden disfrutar en directo gracias a nosotros. También suelen ser aficionados y aficionadas de clubes de Primera división. Por tanto, debemos tener cuidado con programar actos o partidos en momentos en los que coincida algún partido de ese equipo de Primera división que por supuesto va a seguir teniendo mucho más tirón que nosotros.
No podemos intentar competir con las estrategias de marketing y comunicación que hacen clubes como el Real Madrid o el Barcelona, que son auténticos transatlánticos de nuestro fútbol. Un informe publicado en la página web Statista desvela que la imagen de marca de estos clubes supera los 1.400 millones de euros en el caso del club madrileño y los 1.300 millones en el caso del equipo catalán, cifras que están incluso por encima de las de algunos de los equipos con más solera de toda Europa. Lógicamente, nosotros no podemos competir con eso y tenemos que centrarnos en evitar al máximo posible que nuestros horarios coincidan con los de estos equipos o con los de algún otro club de Primera división que sepamos que tiene influencia en nuestra localidad.
Tenemos que seguir por el camino que hemos venido marcando en los últimos tiempos y que tan buenos resultados nos ha proporcionado. De momento, sigue siendo mucha la afición que se acerca domingo tras domingo a ver nuestros partidos y queremos seguir manteniendo ese espíritu y esos valores que nos han conducido hasta aquí. El fútbol popular, el que sí está a mano de todas las personas de una localidad, merece y mucho la pena. Es cierto que requiere de mucho esfuerzo, como no podía ser de otra manera, pero los resultados de ese esfuerzo nos dejan una enorme satisfacción y un reconocimiento que no se paga con dinero.
Todos los éxitos que hemos venido consiguiendo últimamente se los debemos al branding. Por eso, con independencia de si manejáis una empresa o cualquier otro club deportivo, tenéis que apostar por este branding. Es una manera de diferenciarse, de resaltar todo lo que supone nuestra marca, todos sus valores. Nadie va a venir a hacerlo por nosotros. Es hora de arremangarse y ponerse a trabajar para que vuestras marcas ganen tanto valor como ganó la nuestra. El orgullo que tenemos después del trabajo realizado no nos cabe en el pecho y queremos seguir presumiendo de ello.